El Consejo Superior de la UNIVERSIDAD NACIONAL ARTURO JAURETCHE manifestó su profunda preocupación y estado de alerta ante la situación crítica que atraviesa el sistema universitario público nacional.
En este sentido, el Consejo Interuniversitario Nacional, reunido el 21 de febrero del presente año, expresó enfáticamente la preocupación por la situación actual solicitando:
a) incrementar razonablemente los gastos de funcionamiento mensuales, actualizándolos conforme el proceso inflacionario que atravesamos, de manera de garantizar la continuidad de nuestras actividades y el cumplimiento de nuestra misión;
b) actualizar los salarios de docentes y Nodocentes;
c) dar continuidad a los programas universitarios vigentes destinados a inversión en obras de infraestructura, equipamiento y sostenimiento de los programas de becas; y
d) garantizar el presupuesto necesario para sostener las actividades de ciencia, tecnología y extensión.
En la misma dirección, el plenario de Secretarios Generales de FATUN, reunido día 21 de febrero, manifestó el estado y alerta por la situación, rechazando la oferta salarial paupérrima, exponiendo el incremento de la inflación, los costos de transporte y servicios, entre otros factores que afectan de manera directa el ingreso de las y los trabajadores.
El desfinanciamiento de las Universidades Nacionales, producto de la no actualización de los gastos de funcionamiento en un contexto de alta inflación, torna insostenible afrontar los gastos cotidianos intrínsecos al desenvolvimiento de las actividades académicas y de gestión, como así también las becas, las actividades de investigación y vinculación, y toda otra actividad regular de las casas de estudio. En este sentido, respaldamos el pedido de apertura y aumento de las mismas.
Este desfinanciamiento atenta contra el principio básico consagrado por las sucesivas Conferencias Regionales de la Educación Superior, entendiendo a la educación superior como un bien público social, un derecho humano y universal, y un deber del Estado.
En consecuencia, la comunidad educativa de la UNAJ expresa una profunda preocupación por la continuidad de políticas y programas de apoyo a las trayectorias académicas de nuestros estudiantes. El aumento excesivo del transporte público y la reducción de subsidios han dificultado el traslado de los estudiantes, por lo que el boleto estudiantil educativo es esencial para que puedan continuar movilizándose.
En definitiva, ante el incremento de los precios de la canasta básica y la inflación, es fundamental la continuidad, apertura y ampliación de las becas PROGRESAR y las estratégicas Manuel Belgrano, que benefician a más de 10.000 estudiantes en nuestra universidad.
Durante los 40 años de democracia las universidades públicas han sido un claro ejemplo de institucionalidad, destacada formación profesional de excelencia, producción de conocimiento comprometido con los grandes problemas nacionales, construcción democrática y respeto por los derechos humanos.
En Argentina, todos los sectores vinculados con el desarrollo productivo incluyen investigación y conocimiento generado en las universidades y el sistema científico. En las escuelas, los hospitales, las fábricas, los comercios, el campo, los escenarios, el mar, el espacio y en cada casa, las y los profesionales, el conocimiento, el arte y la tecnología que salen de las universidades están en todos lados y son parte de la vida cotidiana de los 47.000.000 de argentinas y argentinos.
Por ello, es responsabilidad de todas y todos, poner en valor el rol estratégico de la Universidad Pública y que esas búsquedas se solucionan con más y mejor educación y universidad pública, con más y mejor inversión en formación universitaria y ciencia nacional. Y es responsabilidad del Estado garantizar el derecho a la educación, para lo que debe estipularse y ejecutarse un presupuesto acorde.
